Todos los años contemplamos como aumenta el consumo de estupefacientes, a pesar de la cantidad de la información con la que contamos. Nuevos perfiles de consumidor de drogas, nuevas sustancias ilegales en el mercado, pero un punto en común que no pasa de moda: adicciones que comienzan a controlar tu vida y la van destruyendo poco a poco.
Anfetamina, metanfetamina, MDMA, ¿te suenan? Según el último Informe Europeo sobre Drogas estas sustancias son junto a la cocaína las drogas cuyo consumo está experimentando más auge, tal que ya las llaman las drogas del siglo XXI.
Pero como todas las sustancias ilegales, su abuso conlleva una serie de problemas de salud, sociales, laborales y familiares.
Estos son los principales efectos del consumo de estupefacientes:
Efecto 1: El consumo de drogas destruye tu salud
El consumo prolongado conlleva problemas de salud crónicos y agudos. Estos se ven agravados dependiendo de la manera en la que se consuma (la vía de administración de la droga trae serios problemas adicionales).
Enfermedades cardiovasculares
Partiendo de la base de que la mayoría de las drogas alteran el funcionamiento normal del corazón, no resulta complejo comprender que las taquicardias, la hipertensión o incluso los infartos pueden ser una consecuencia directa de la adicción.
- Problemas del sistema inmune
Es común que los dependientes vean debilitado su sistema inmunológico haciéndoles más susceptibles a enfermedades e infecciones. De esta forma, es muy probable que las personas adictas padezcan de enfermedades respiratorias, sufran de neumonía o se vean contagiadas por afecciones de manera continuada.
- Problemas de salud mental
Es importante señalar que la salud no sólo son dolencias o indisposiciones físicas. El consumo de sustancias estupefacientes también genera problemas de salud mental. En reiteradas ocasiones aquellos que abusan de estupefacientes padecen de cambios de humor, ansiedad, alteraciones del sueño o depresión.
Tampoco debemos olvidar que el consumo prolongado suele derivar en una adicción seria cuya consecuencia directa es la pérdida del control de su vida. Ni que el síndrome de abstinencia también tiene efectos secundarios catastróficos.
Efecto 2: El consumo de drogas destruye tu vida social
La adicción a las drogas acarrea un obstáculo en la vida social de las personas. Es cierto, que sobre todo los más jóvenes, se adentran en el mundo de las drogas tratando de “formar parte” de un grupo. Suena mal y resulta peor: la pertenencia o el no sentirse excluido son algunos de los principales motivos entre los adolescentes para comenzar a consumir. Pero lo cierto, es que la espiral se va cerrando poco a poco, marginando a aquel que padece la adicción. Con la idea constante de evadirse, de consumir; comienza la toma individual de estupefacientes.
A esto se le suman las dificultades comunicativas y cognitivas que suelen tener los dependientes. El resultado es inmediato: un distanciamiento de todos los que antes formaban parte de “su equipo”.
Por esa razón podemos afirmar que las drogas son un círculo vicioso: consumes para no estar solo y acabas más solo de lo que estabas al principio.
Efecto 3. Con las drogas dices adiós a la familia, adiós al trabajo y a tus sueños
La convivencia con una persona que padece una adicción resulta muy complejo. A veces, el único pensamiento que tiene un drogodependiente durante su jornada es: “A ver cuando acabo para poder consumir”.
En el ámbito laboral esto se traduce a una falta de motivación o a la ausencia de metas. Esto provoca el rechazo por parte de directivos y compañeros que se esfuerzan cada día en mejorar. El repudio rápidamente puede convertirse en despido lo que acarrea de manera directa un distanciamiento con la familia. ¿Cómo hemos llegado a este punto?
Para el drogadicto no es sencillo ver como su mundo se desmorona. Contemplar como todo lo que había construido se ha ido diluyendo con cada toma. Quedarse sin amigos, sin vida social es grave, pero perder el apoyo de la familia y el trabajo se convierte en trascendental.
En Impasse sabemos que la adicción a las drogas afecta a todos los ámbitos de la persona. Por ello, tratamos la dependencia desde numerosos puntos de vista. Evitando no sólo la recaída, sino también que se repitan los patrones de conducta que han llevado a la persona hasta nuestra consulta.
“No lo dudes y ven a visitarnos. Te espera una vida mejor”