Table of Contents
Satiriasis: ¿qué es?
De acuerdo al doctor Juan Carlos Romi, la satiriasis se define como “el apetito sexual (hipergenitalidad) exagerado y compulsivo del varón, casi siempre como consecuencia de alguna patología cerebral de base.” En el caso de las personas que sufren satiriasis, a diferencia de los individuos que padecen de otros trastornos, no se produce un aumento en la cantidad de hormonas.
La satiriasis o hipersexualidad masculina se manifiesta en un apetito desenfrenado, que lleva al hombre a tener relaciones sexuales de forma frecuente tanto con mujeres como con hombres, o incluso en grupo. Igualmente, la satiriasis también se presenta en forma de masturbación, que el individuo puede llegar a practicar en diferentes ocasiones a lo largo del día. Sin embargo, en ninguno de los casos se consigue sentir satisfacción o placer con ello.
Diferencia entre hipersexualidad y ninfomanía
No existe ninguna diferencia entre la hipersexualidad y la ninfomanía, teniendo en cuenta que la ninfomanía se define como una forma de hipersexualidad femenina. No obstante, donde sí se puede hacer una distinción es entre la satiriasis y la ninfomanía. Mientras que el primer concepto es únicamente aplicable al sexo masculino, la ninfomanía solamente sirve para hablar de las mujeres.
En cualquier caso, aunque cada uno de estos conceptos aplica a un sexo distinto, tanto la satiriasis como la ninfomanía supone la hipersexualidad del individuo afectado. Esto se refleja en una dependencia sin control a la gratificación sexual.
Consecuencias de la hipersexualidad
Según García Barba et. al, la hipersexualidad viene en una gran parte de los casos derivada de problemas emocionales en los individuos afectados por este trastorno. Las consecuencias de la hipersexualidad quedan reflejadas en diferentes conductas, como son: cambios frecuentes de parejas sexuales, exceso de masturbación, deseo continuo de mantener relaciones sexuales o problemas para sentir satisfacción tras mantener sexo.
Al mismo tiempo, todo ello puede derivar en sentimiento de culpabilidad o vergüenza, así como en trastornos de salud mental. Mantener relaciones sexuales con múltiples personas también aumenta la probabilidad de contraer enfermedades de transmisión sexual.
¿Cómo tratar la hipersexualidad?
Para conseguir tratar la hipersexualidad, será imprescindible asistir a psicoterapia, acudir a grupos de autoayuda y puede que se requiera de medicación. Con todo ello, se buscará calmar el deseo sexual y reducir esta conducta, además de lograr mantener relaciones sexuales de forma saludable.
Desde Impasse adicciones somos expertos en adicciones al sexo. Estaremos encantados de atenderte y de guiarte en el camino para salir de la hipersexualidad.